… ¿A qué,
pues, deben dirigirse todos los esfuerzos de la educación? A mejorar el niño o
la niña… a reformarlo…, a restablecerlo en sus relaciones con Dios, con
la naturaleza, con el hombre y consigo
mismo; a obrar un cambio saludable en sus sentimientos, ideas, hábitos, etc.,
tal es el deber inmenso de todo maestro que educa a los niños. S.E.O. (RT 103
(1881): 183-187)
Para compartir
¿A qué estamos llamadas como educadoras y como Centros Teresianos?,
¿Qué invitación nos hace S. E.O.?
Nos detenemos a reconocer a la persona que queremos acompañar durante su desarrollo y formación
Para compartir
Vuelve al capítulo persona de la PET pág. 9 a la 14
¿Cómo concebimos a la persona?
¿Cuáles acciones cotidianas existentes afianzan esta concepción?
¿Cuáles acciones podemos emprender para hacer vida esta concepción?
Cerramos el lunes 23 de Enero de 2017